Hoy puse la mesa… y te esperé.

Hoy puse la mesa… y te esperé

Cociné para vos

Puse flores para que haya más color

Puse mantel… para que quede mejor

Hoy puse la mesa… y te esperé

Puse mi corazón en cada detalle

Porque quiero seguir prendiendo velas en cada almuerzo

Para que sea más romántico, sí.

Pero también para que podamos seguir viendo aquello que tanto nos unió; y para que no nos olvidemos que tenemos que seguir uniéndonos cada día.

Si hace falta prender dos… estoy dispuesta. 

Quiero verte claramente.

Hoy puse la mesa… y puse el corazón en cada detalle.

Preparé la comida que más te gusta.

Imaginé tu sonrisa al ver todo listo, y me reí a carcajadas

Hoy puse la mesa…

No me olvido de poner los vasos.

Esos que nos permiten tomar un descanso.

Mirarnos, refrescarnos y disfrutar el paisaje…

Para recordar que no estamos solos… que no caminamos solos 

Y quiero seguir poniendo manteles que sostengan todo lo que derramamos.

Que nos permitan ver en qué nos equivocamos

pero que también nos ayuden a levantar todo eso que, sin querer, a veces tiramos.

 Hoy puse la mesa… y te esperé.

alguna vez... y siempre

Cuando deje de hablarte de mí tal vez pueda detenerme a escucharte a vos.

Cuando deje de pensar en mí tal vez sea el momento en que decida pensar en vos.

Siempre renuncié a mí misma, sin una justa y verdadera razón.

Siempre dejé de lado lo que yo era, sin darme cuenta que era yo misma.

Alguna vez escuché otros nombres, y por apuro preferí olvidarlos.

Alguna vez sentí tu grito adentro mío… pero por cansancio preferí cerrar mis oídos.

Nada de todo esto tenía sentido en realidad.

Nada de todo esto me mostraba una cuota de felicidad.

Si decido volver a escucharte ¿vos me vas a escuchar a mí?

La violencia parece querer salir por mis poros.

Algo no anda tan bien como parecía.

Tal vez, cuando alguna vez la nada me abandone, voy a volver a tus brazos por siempre.

como un cuento...

Era casi como la protagonista de un cuento
su vida fue teniendo muchos cambios, muchas idas y venidas
Lo mismo que muchos otros
Aquello que pensaba que sólo a ella le había pasado, era lo que en realidad otros habían vivido de la misma manera
Era casi como un libro
De esos libros que pensás que, aunque sean reales, tanto no lo son.
Algo exageran.
Pero lo que le había pasado a ellas era real.
Algunos podían no creerlo. Pero había sido así

Las historias parecían repetirse.
Era el mismo cuento. Con un solo protagonista repetido. 
Aunque en diferentes tiempos.
Todo era lo mismo. Ellas eran diferentes. 

Eran casi como las actrices de una película.
Aunque sin buscarlo, sin quererlo.

Hoy dijeron basta. Y ese basta retumbó en varios lugares.
El cuento no tiene que seguir escribiéndose. 

Ya no va a haber un cuento igual mientras ellas puedan impedir que se escriba.

Cuando grite tu nombre (m a r c o s)

No quiero que pienses que no te pienso. No quiero que pienses que no te siento.
No hay voz que recuerde más, que la tuya.
Cada vereda que piso parece tener grabado tu nombre...

En cada pintura, en cada letra, vos estás escrito.

No tengo más que miradas para darte. No tengo nada en mis manos que pueda dejarte de recuerdo.

Estás dibujado en las nubes, y aparecés mojando cada recoveco para darme un respiro.
No es que no tenga fuerzas, no es que no me anime...

Puede que sea tu figura la que no me deje pensar en otra cosa.


¿Caminás conmigo?

Tal vez sea eso...
Inventemos alguna melodía que sea nuestra... así, si algo parece hundirse, podemos levantarlo.

Algo insólito, algo rebuscado, que parezca un garabato, pero que sea nuestro, que robe sonrisas.



¿Verde? Si... como tus ojos... eso puede ser.


No es que no sienta nada, es que quiero que no te des cuenta, o que mejor lo descubras sin que te lo diga.
No es que quiero que te alejes, quiero que vueles a donde nunca antes volaste.

¿Me seguís?
¿Puede ser...?

Pero no me lo digas.


Si nos amamos, quiero que nadie lo impida.



Así como dos locos que caminan sueltos por la calle, así quiero que permanezca este amor.

Suelto. Feliz.


No es que no te ame. Es que quiero que todos se sorprendan cuando grite tu nombre.

la alegría de ser tía primeriza...

Una lucecita encendiéndose en algún rincón. 
Despertando muy silenciosamente; pero haciéndose presente desde su pequeñez. 
Nadie imagina cómo será en verdad…sólo deseamos que sonría al ver la luz de sol, y llore de emoción cada vez que respire aire puro.
Milagrosamente se está formando y milagrosamente algún día cantará canciones de niño y jugará a ser grande. 
Nadie sabe cómo será...sólo deseamos que ría al despertar y sueñe cada noche al descansar.
Vos seguí creciendo. 
Descansá… que la mano de Dios te sigue tejiendo…
¡Nosotros te esperamos!

sigo siendo yo...

Sigo siendo una nena…

La niña de la familia que aún no aprendió a crecer

Todos son más grande que yo

Todos saben más que yo

Sigo siendo esa niña

Esa nena que se reía y hacía reír a todos

Sigo trayendo magia… y a veces llantos

Sigo siendo esa nena

Esa niña que amaba pasar tiempo con sus animales sentada en la escalera

Sigo siendo pequeña…diminuta por dentro y por fuera

Sigo jugando a ser grande

Sigo tomando el mate cocido con leche… con criollos sumergidos

Sigo jugando a ser mamá

Sigo amándote como el primer día

Sigo siendo esa niña que te conoció e insistentemente te invitó a tomar algo con ella

Sigo siendo esa nena

Que tengas un lindo día

Que tengas un lindo día

Que la gente te salude cuando pase por tu lado

Que alguien te sonría sólo porque alguna vez aprendió buenos modales

Que quien te cruce vea la diferencia

Que quien se pare al lado tuyo se dé cuenta que estás feliz

Que si te sentás solo en algún parque, nadie quiera sacarte más que una sonrisa

Que tengas un bonito día

Que el sol brille sobre tu voz

Que el viento te acaricie la espalda y te acompañe a donde vayas

Que te crucen por la calle y te saluden

Que te vean y puedan mostrarse simpáticos al ver tu rostro haciendo lo mismo

Que tu perfume despliegue abundantes buenas noticias contagiando calidez y ánimo

Simplemente...

¡Que tengas un bonito día!