Cuando deje de hablarte de mí tal vez pueda detenerme a
escucharte a vos.
Cuando deje de pensar en mí tal vez sea el momento en que
decida pensar en vos.
Siempre renuncié a mí misma, sin una justa y verdadera razón.
Siempre dejé de lado lo que yo era, sin darme cuenta que era
yo misma.
Alguna vez escuché otros nombres, y por apuro preferí
olvidarlos.
Alguna vez sentí tu grito adentro mío… pero por cansancio
preferí cerrar mis oídos.
Nada de todo esto tenía sentido en realidad.
Nada de todo esto me mostraba una cuota de felicidad.
Si decido volver a escucharte ¿vos me vas a escuchar
a mí?
La violencia parece querer salir por mis poros.
Algo no anda tan bien como parecía.
Tal vez, cuando alguna vez la nada me abandone, voy a volver
a tus brazos por siempre.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario